jueves, 20 de septiembre de 2012

Una película que viví mientras dormía


No me di cuenta cuándo pasé de solo cerrar los ojos y pensar a empezar a soñar que podía volar y el cielo conquistar, que podía luego visitar todos mis seres queridos y hasta los que entre nosotros no se encuentran. Pude ver tantas cosas que quería hace rato que una euforia casi que incontrolable llegó a mí, soñé con tranquilidad, paz y serenidad, esa que sé como muchos en mi caso, a ratos muy difícil de sentir. Así que, me senté a tomar nota aprovechando las sensaciones e ideas del momento y esto fue lo que garabateé:
Desde un payaso dando clases hasta llegar la maravilla más deseada; qué más da que sea solo un filtro mental, pues en el mundo y estado donde sueño, siempre estoy contento. Infinita y valiosa imaginación la que se desata cuando paso de mi vigilia.
Muchas veces supera sus límites y te lleva donde más deseos hay de estar.
Qué poderosa es la mente, como para crear todo un mundo donde se diseño todo especial y específicamente para ti. Básicamente una película contigo como director, guionista y hasta papel protagónico tienes.
Rozar la realidad con la fantasía y volverlas tan reales que hasta parece que es en vida, que se siente, se vive y se tiene lo que ahí uno fija, sin duda, es uno de los placeres de la vida.
Por eso mismo no renuncies a tus sueños y sigue durmiendo dijeron por ahí, yo me guío y apego a esta pequeña frase porque el día que no sueñe es un descanso incompleto.
Y por nada del mundo me perdería otro de los capítulos que podría brindarme mi sueño, son limitados como una serie y a veces hasta con urdes que te dejarán pensado todo el día, un par de cuentos que contar y mil historias que se podrían crear.
Quién diría que nos privilegiaron con el placer de hacerlo cada noche y cada pestañazo que peguemos. Y bendito sea quien entienda esa ocurrencia.
Para hacerlo solo hace falta dormir, pero nada mejor que hacerlo como reyes, así que tomemos una cobija, una almohada y a caer a cualquier parte para empezar con esta faena.
A dormir los invito y a soñar, soñar y vivir una vez más como lo que se quiere ser, bienvenido sea. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario

En busca de conocimiento

En busca de conocimiento
Que mejor forma de hacerlo que pensando y explorando.